Cómo con poco se puede hacer mucho

Un amigo mío que, por circunstancias de la vida nos habíamos perdido la pista durante mucho tiempo, nos reencontramos gracias al famoso reportaje de un servidor en la televisión. Él se puso en contacto conmigo para transmitirme su idea de intentar aportar su granito de arena a la fundación "niños de mi barrio", con la que ya sabéis que colaboramos mi amigo Edu, Aleyda y yo desde hace tiempo. El caso es que, gracias a su empeño y varios correos intercambiados para ver como hacíamos llegar su ayuda, él recaudó en éstas fechas navideñas recién pasadas entre los compañeros de su empresa, el Grupo Antolín, un dinerillo, 440€, y me los envió para que yo lo gestionara de la mejor manera posible. Aquí están los resultados, y la demostración, una vez más, de como con poquito se puede hacer mucho: 2 ventiladores para las 2 salas polivalentes de la escuelita,

ya que los que había estaban dañados, 4 CPU para cambiarlos por los existentes que, por los problemas de cortes de luz frecuentes en la zona se habían estropeado y no funcionaban desde hace mas de un mes, y costaba casi lo mismo arreglarlos que comprar 4 semiusados. Ësta aportación a la fundación servirá para autofinanciar algunos gastos, como el pago del alquiler mensual del local , facturas de internet, etc, ya que los ordenadores se utilizan para dar clases los niños, y también como centro de internet del barrio y para hacer fotocopias o pasar trabajos, etc...

Una merienda para la fiesta del niño, que se celebró el último día de escuela antes de las vacaciones de navidad 1 UPS, que es un equipo para evitar los cortes de luz en los ordenadores 40 paquetes de bizcochitos, con 24 undades cada uno, que aseguran un desayuno para unos 10 días a los pequeños de la escuela, junto con 10 paquetes de 24 zumos pequeños cada uno. Económicamente hablando, 80€ ventiladores + 170€, los 4 PCU + 30€ de 1 UP S+ 40€ de la picadera + 80€ de los bizcochitos y 70€ de los jugos hacen un total de 470€. GRACIAS MIGUEL Y AMIGOS DEL GRUPO ANTOLIN DE PARTE DE LOS NIÑOS DEL BARRIO DE LOS GUANDULES, EN SANTO DOMINGO